Viejas costumbres, vuelven, ha comenzado la temporada y de nuevo, las cosas y circunstancias que rodean la competición, parecen continuistas. A pesar de ser la primera carrera de 2011, el pasado domingo, en Almodovar del Río, parecía un día cualquiera de 2010.
Sabemos que es la primera carrera, que el tiempo apenas nos ha dejado rodar en pretemporada, pero los fantasmas del pasado regresan. Motor que no anda bien, problemillas en la electrónica y porque no, cosas extrañas, como coches de radiocontrol que vuelan, por donde no deben y te parten el carburador o que se pare el motor a una cuarta de la linea de llegada.
Pero a pesar de todo, se compitió y en cierta manera se disfrutó.
Pero a pesar de todo, se compitió y en cierta manera se disfrutó.
Comenzaban las mangas de clasificación, con reacciones extrañas en la carburación, al final no detectamos si fue el varillaje, problema eléctrico o de las agujas, aceleraba en el mando y no andaba y cuando lebantabas el dedo se aceleraba. Tal como vino el problema se fue y se realizó una decente primera manga. La segunda comenzaba igual, con cosillas raras pero en las vueltas de calentamiento se quitaron. Lanzado a por un buen resultado, en la segunda vuelta, tras superar los dubing y el piano posterior, iniciando el salto anterior a la parabólica, sale de no se donde un coche, saltándose los dubing y el carril, e impacta directamente en su Mugen, parándose este, unos metros más adelante. Cuando el recogecoches, trae el vehículo a boxes, le faltaba completamente el barrilete de la aguja de altas y un buen bollo en el escape. Retirada.
En la tercera manga, la cosa fue mejor, pero no todo lo que se desearía. Al final, clasificado para cuartos de final.
Salida segundo, pero al finalizar la primera vuelta, pasó en último lugar, pero, su ritmo era bueno y en dos vueltas ya se ponían en segundo lugar, que no saltaría hasta la última vuelta, donde cometió un error a la entrada de la deslizante y fue adelantado por el tercero. Pero lo que casi fue una desgracia fue en la última curva, cuando un doblado, no se sabe porque, cuando ya estaba rebasado, le invistió por detrás, haciéndole volcar a escasos20 centímetros de la llegada y tras una subrrealista levantada de coches, se paró el motor, llegando a contar la vuelta por inercia del movimiento de la dirección de un lado a otro y porque le llevaba más de una vuelta al cuarto y al quinto.
En semifinales, ya más relajado, se defendió entre el octavo y el décimo puesto y después de catorce minutos y cuando los puestos de delante estaban a punto de caer, se estropeó el sistema de conteo y finalizó la semifinal. Un decepcionante puesto 22, que después de todo lo pasado en la jornada, hay que darse por satisfecho. A seguir rodando y mejorando.
